*Los sopes del Bon Jovi y del Mario Bros son toda una tradición de la ciudad petrólera y forman parte de la historia de vida de miles de estudiantes
Édgar Escamilla
Poza Rica, Ver.- Sí, así como lo leyó en el titular, Bon Jovi preparaba sopes en Poza Rica, pero no me refiero al célebre John Francis Bongiovi Jr., sino a César Acosta, un ex trabajador petrolero que ante la adversidad que vivió el sector tras la detención del líder sindical Joaquín Hernández Galicia “la Quina”, tuvo la idea, junto a su hermano del alma, de emprender en el negocio de la comida callejera.
Con o sin firma (crema), rojos, verdes o campechanos, con o sin chorizo; de tortilla o de maíz, los sopes del Bon Jovi y del Mario Bros forman parte de la historia de vida de miles de estudiantes, y de miles de pozarricenses que, a pesar de haber emigrado, siempre los tienen en mente, estén en donde estén.
Por su forma de ser amable, dicharachero, llevado, juguetón; César fue conocido por múltiples apodos, entre ellos Colosio y hasta como Chuck Norris; toda una celebridad.
Desafortunadamente la vida se ensañó con el Bon Jovi y después de una lucha contra el cáncer, abandonó su forma corpórea en mayo de 2016, pero su legado fue continuado por su compañero de mil batallas, el Mario Bros.
Mil y un historias se han entretejido alrededor de aquel pequeño local de sopes ubicado frente a una de las escuelas de mayor tradición en Poza Rica, la Escuela Secundaria y de Bachilleres Oficial No. 8 “Emiliano Zapata”, la popular ESBO #8, cuya historia merece un artículo completo aparte, pero en síntesis, es fruto del esfuerzo de los integrantes de la Asociación Estudiantil Pozarricense, quienes arriesgaron sus vidas al apostarse frente al autobús en el que viajaba el ex presidente Gustavo Díaz Ordaz para pedirle la construcción de la escuela.
Los Sopes del Bon Jovi y el Mario Bros se convirtieron así en una tradición en Poza Rica, ciudad en la que existe una infinita oferta gastronómica, fruto de la mezcla de culturas que se dio tras la conformación de la ciudad con migrantes de todo el país y del extranjero.
Durante estos años se han inundado, han cambiado de ubicación (pero siempre sobre la avenida Palmas y frente a la ESBO), los huracanes les han volteado el puesto de lámina, pero han permanecido en el gusto popular durante 30 años.